JOSHIN-KOKYUU-HO
(Desculpem não ter traduzido!!!)
“Joshin” significa parte superior del cuerpo, “Kokyuu” quiere decir respiración y “Ho” significa técnica. Se trata pues, de un ejercicio de respiración, conocido como “ejercicio de respiración para purificar el alma.” Se realiza para proceder a una autolimpieza y purificación del cuerpo áurico, sirve para energizar, calma los pensamientos, las emociones y purifica al organismo. Ayuda a sentir mejor el flujo de la energía activando los canales del Reiki, purifica la circulación sanguínea y aumenta la vitalidad magnética del cuerpo.
La respiración, acto esencial para la vida, nos une a todo lo que nos envuelve. Las personas, los animales y las plantas respiran el mismo aire que inhalamos y exhalamos. El aire no es de nadie y, al mismo tiempo, es de todos. Las energías provenientes de la respiración llegan hasta la menor de nuestras células.
Respirar es algo más que inhalar y exhalar simplemente el aire. La respiración es un indicador importante de cómo una persona se encuentra ligada a la vida y de qué forma afronta sus problemas y desafíos. Las personas distendidas y relajadas respiran de manera profunda y rítmica; otras, más tensas, lo hacen de manera corta y apresurada.
La técnica Joshin-kokyuu nos ayuda a modificar los malos hábitos respiratorios, ayudando también a que la fuerza vital (Prana en sánscrito) penetre mejor en nuestro cuerpo. Permite una mejor captación de la energía vital presente en el aire y vitaliza nuestro cuerpo aumentando nuestra capacidad de canalizar energía. Esta técnica es especialmente útil antes de una sesión de Reiki; sobre todo, si estamos cansados.
Las emociones afectan al chakra del Plexo Solar que actúa sobre el diafragma alterando su ritmo. Cuando una persona se halla muy ansiosa y preocupada se ve afectado su chakra del Plexo Solar, por lo que si intentamos normalizar el ritmo de la respiración, aportaremos tranquilidad, paz y serenidad al espíritu. Con los ejercicios respiratorios nos relajamos mejor, aliviamos las tensiones emocionales y poco a poco elevamos nuestras vibraciones y nuestro nivel de energía.
¿Cómo se realiza la técnica?
1. Sentarse cómodamente dejando descansar las manos sobre el regazo con las palmas hacia arriba. Inspirar de forma calmada y profunda por la nariz, y visualizar la entrada de la energía, de color blanco, a través del chakra coronario.
2. Llevar la mente hacia el tandem inferior (de 3 a 5 cm debajo del ombligo) y prestar atención a la respiración. Retener la energía conteniendo la respiración de 3 a 4 segundos. Sentir como la energía se expande y se irradia a todos los órganos, por cada célula del cuerpo.
3. Espirar (preferentemente por la boca) e imaginar que el aire también se libera por los chakras de las manos, por la punta de los dedos y chakras de los pies, vitalizando y limpiando nuestro cuerpo hasta convertirnos en un canal limpio de energía Reiki.
El tiempo ideal de práctica es de 10 minutos, prestando atención a las retenciones (3 o 4 segundos) y al ritmo (lento y profundo). El ritmo lento altera el estado mental y disminuye gradualmente los pensamientos desordenados, y las retenciones vigorizan y purifican el organismo. Gradualmente empezaremos a sentir paz, serenidad, y tranquilidad.
Al realizar esta técnica el cuerpo áurico se hace más brillante y expandido, y con la práctica, sentiremos cómo fluye la energía de una manera muy intensa.
(*) Las personas hipertensas, con problemas cardíacos o respiratorios, deben realizar la técnica con cierto cuidado e intercalar respiraciones normales se siente alguna molestia.
In "Manual de Reiki Clássico" de Carlos Carvalho
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